12 preguntas que deberías hacer en una entrevista

Ir a una entrevista sin haberla preparado es como lanzarte de un avión sin paracaídas. Llega ese momento en que te dejan lanzar dudas y piensas: "¿preguntas para una entrevista?".

Informarte sobre la empresa que te va a entrevistar, sus valores, sus últimos movimientos o las personas que la componen es casi de obligado cumplimiento si quieres generar huella. 

Pero, aunque muchas veces la preparación haya sido concienzuda, en el momento de la conversación podemos ponernos nerviosos, no atinar con las palabras y olvidarnos de hacer preguntas importantes.

Así que, previendo esto, hemos desarrollado una lista de las doce cosas que no puedes olvidarte preguntar. 

Vamos con la chuleta de preguntas que deberías hacer sí o sí en una entrevista de trabajo.

 

Qué preguntas hacer en una entrevista de empleo

- En qué momento está el proyecto/ producto

Uno de los momentos más ilusionantes para los desarrolladores son los primeros pasos en un proyecto nuevo. Comenzar desde cero un desarrollo te permite utilizar la creatividad y la estrategia para definir la estructura, las tecnologías, la arquitectura, las buenas prácticas…

Pero si eres junior o tienes muy poca experiencia, no vas a querer enfrentarte a estos retos, porque no sabrás por dónde empezar. 

Puede ser muy frustrante comenzar un proyecto desde cero sin la guía adecuada, por lo que si el proyecto o producto ya están funcionando y necesitan mejorar rendimiento, ampliar funcionalidades, refactorizar o hacer mantenimiento, puede ser un buen punto para comenzar. 

- Cómo será mi día a día

Esto te ayudará a entender mejor cómo se trabaja y qué esperan de ti. Nunca se acercará al 100% de la realidad, pero siempre es mejor que no tener información. 

Pregunta por cómo se comunica el equipo (slack, teams, correo, etc.), cómo se distribuyen las responsabilidades y las tareas en los proyectos o algo tan sencillo como cuál es el horario habitual. 

- ¿Cuál o cuáles son los retos que afronta la compañía ahora mismo? Técnico, financiero, internacionalización… 

Esta pregunta es importante para comprender el momento en el que se encuentra la empresa. Una migración de tecnología o de infraestructura es un momento muy bonito de vivir porque vas a aprender muchísimo.

Sin embargo, si hay prisa por entregar el desarrollo para poder vender el producto a más clientes, puede ser estresante y fastidiar tu aprendizaje. 

Entiende que eres una persona con poca experiencia y con conocimientos muy teóricos. Vas a necesitar guía y ayuda constante, por lo que cuanto más estable sea el proyecto, más posibilidades de aprendizaje vas a tener. 

- ¿Hay un onboarding definido? ¿Contaré con una persona de apoyo durante las primeras semanas?

¿Qué sucedería si el primer día te dan una tarea para empezar a programar en tu nuevo trabajo? Pues que, efectivamente, no vas a saber ni por dónde empezar. 

Lo más habitual es que durante las primeras semanas tengas que ponerte al día con la documentación sobre la compañía y sus procesos, las herramientas y el estado del proyecto o del producto. Más tarde, comenzarás a dar tus primeros pasos de la mano de alguien con experiencia y conocimiento, de manera que te pueda tutorizar y corregir. El objetivo de estos primeros pasos es que cojas soltura y confianza. Pero también que entiendas cómo se hacen las cosas en la compañía, a quién pedir ayuda o cómo desbloquear determinadas situaciones. 

Como junior, debes tener un periodo de formación y de aprendizaje sin miedo a equivocarte y tutorizado por alguien más senior. 

- ¿Con qué buenas prácticas se trabaja en el equipo técnico?

Las buenas prácticas no son solamente técnicas de desarrollo de software. También puede ser buenas prácticas en la gestión de equipos, de liderazgo o de comunicación. 

Pero como vas a trabajar en el desarrollo de un producto, lo mejor es tener una idea de lo que te vas a encontrar. 

El testing es fundamental para el buen funcionamiento (y sobre todo mantenimiento) del software, por lo que es posible que te hablen de testing o prueba unitarias o de integración. 

No te preocupes si no has hecho muchas pruebas de software en tu carrera, es normal. Pero compañías donde se practica TDD o TBD son un muy buen primer paso para acostumbrarte al testing como procedimiento dentro del desarrollo de software.

- ¿Con qué metodología se organiza el equipo?

Depende del tamaño de la compañía y del equipo en el que vayas a trabajar, la organización será muy distinta. 

Los equipos pequeños suelen organizarse utilizando Kanban y metodologías Lean. Y conforme las compañías empiezan a crecer y a crear sub-equipos, es muy habitual que comiencen a utilizar Agile o Scrum.

Si no los has escuchado nunca, te pueden parecer “palabros”, pero son metodologías que (bien implementadas) pueden ser muy útiles para la comunicación entre equipos y el desarrollo de software a mayor velocidad. 

- ¿Cómo serán mis compañeros? Experiencia, diversidad, tiempo en la empresa…

Esta pregunta me parece de las más relevantes de todas. No puedes ser el junior de un equipo sin seniors. 

Saber que hay personas que velarán por tu aprendizaje es fundamental cuando estás empezando. Tendrás muchas inseguridades, miedos y no querrás cometer errores. Y para eso debes tener a alguien que te acompañe en los inicios. 

Además, la diversidad del equipo mejora siempre las soluciones que se desarrollan y la cultura de la empresa. Por ejemplo, trabajar con personas de otras nacionalidades o en entornos donde se habla inglés de manera habitual te servirán mucho cuando decidas cambiar de compañía. 

- ¿Cuál es la horquilla salarial para este puesto?

A veces, hablar de salario parece tabú. Pero la realidad es que todos trabajamos por dinero, y cuando estás optando a un puesto de trabajo, saber cuál será tu sueldo o cuál es la horquilla en la que te pueden ofertar te puede ayudar a decidirte. 

Si la empresa no te lo quiere decir, tú eres quien decide si continuar en el proceso o no, pero no es una buena práctica de transparencia. 

- ¿Cada cuánto son las revisiones salariales? ¿Hay revisiones de rendimiento? ¿Cada cuánto?

Estas preguntas pueden darte vergüenza hacerlas al principio, pero tomar una decisión sin saber su respuesta puede ser motivo de arrepentimiento. 

Como junior, se espera que crezcas y aprendas dentro de la compañía. Esto llevará a que aportes más y mejor con tu trabajo. Y por eso mismo, tu salario debe cambiar con el tiempo, adaptándose al valor que transmites a la empresa.

Saber cada cuánto se hacen las revisiones salariales, y sobre todo, si se hacen en función de objetivos, te puede ayudar a decidir. 

No des por sentado que las revisiones son anuales. Hay compañías en las que se hacen a los 6 meses de empezar, o cada 6 meses. Y otras, que son matrices de empresas de otros países donde se hacen cada 2 años.

Y lo mismo con las evaluaciones de rendimiento. Una evaluación bien hecha por la persona que te tutorice o tu responsable te puede ayudar a entender qué esperan de ti o hacia dónde crecer en los próximos meses. Este feedback es fundamental para tu desarrollo como técnico/a. 

- ¿Existe un plan de carrera?

Algunas compañías no tienen un plan de carrera definido, más allá de la experiencia o el seniority que se adquiera con el trabajo y los años. 

Pero otras contemplan diferentes caminos para las personas que incorporan al equipo. Por ejemplo, los saltos laterales son muy habituales en nuestro sector: puedes ser backender y pasarte a front, o a infraestructura. 

Saber que una vez dentro puedes ascender o aportar en otros departamentos te hará verte en esa empresa en un futuro y podrás tomar mejor la decisión. 

Eso sí, no es algo que debas pensar demasiado al inicio, tu objetivo es aprender, no lo olvides. 

- ¿Hay formaciones internas o presupuesto para formación?

Como junior, aprenderás de todas las personas que te rodean. Cada impacto estará formando en ti una idea de cómo hacer las cosas. Pero una vez pasados los primeros meses, es posible que te enfrentes a retos técnicos que nadie en la empresa ha tocado antes. 

Es habitual. Los productos crecen y las necesidades cambian. Por eso, para poder aportar, las formaciones en herramientas o tecnologías son comunes. 

Muchas empresas tienen un presupuesto destinado a esto. Otras generan sus propias formaciones. Aprovéchalas, porque es conocimiento que te llevas en tu mochila para siempre. 

- ¿Cómo es el proceso de selección?

Esta pregunta parece muy obvia, ¿verdad? Pero no sabes la cantidad de sorpresas que te puedes llevar al saber los pasos que te quedan del proceso. 

Por ejemplo, ¿hay prueba técnica? ¿Cómo es? ¿Es un ejercicio sencillo? ¿Cuánto tiempo esperan que le dediques? ¿Qué objetivo tiene?

Es muy posible que haya más de una entrevista en el proceso. Pregunta con quién será, que no te sorprendan. 

Y que no te dé miedo preguntar si hay más personas en el proceso o no. Necesitas información para tomar decisiones, y la conseguirás preguntando. 

- ¿Qué se espera de mí en los primeros meses?

Esto es pura gestión de expectativas. Si te dicen que estarás volando solo/a, y aportando funcionalidades al producto… ¡Corre y no mires atrás! Como junior, tus expectativas son aprender, y junto con cierta supervisión, empezar a dar pequeños pasos. 

Si las responsabilidades del puesto están más asociadas a un senior que a un junior, quizás ese no es el sitio. 

Seguro que no todas ellas son necesarias en cada entrevista. Por suerte, muchas ofertas están bien redactadas y ya te dan la solución a estas cuestiones. Pero si no tienes la seguridad de saber la respuesta, pregunta siempre. No te quedes con la duda. 

Si quieres seguir aprendiendo más sobre, cómo es un proceso de selección, aquí te dejo otro artículo donde explicamos los procesos más habituales y cómo afrontarlos.