Trucos para destacar en una primera entrevista de trabajo
Previously on Manfred…📺
Hace unos días en este blog hablamos de consejos para mejorar tu CV. A lo largo de mi paso por Manfred –y, prácticamente durante mi carrera–, muchas personas me han preguntado por tips para la primera entrevista de trabajo.
¿Qué podemos hacer para ir más tranquilos/as? ¿Qué deberíamos preparar? ¿Cómo abordamos esa entrevista para destacar entre todas las personas que entrevistan?
Dudas, que, vistas con perspectiva, pueden resultar nimiedades, pero que, en el momento, se hacen muros infranqueables. Es por ello que, con todas estas preguntas en el tintero, me animo a escribir otra vez y contar algunos trucos que te pueden ser de utilidad para ser Awesómico/a en tu próxima entrevista.
Vamos a dividir los consejos en tres momentos: qué hacer antes, durante y después de la entrevista.
Antes de la entrevista
Si recibes una llamada o un email invitándote a tener una reunión –ya sea presencial o videollamada–, asegúrate de tener clara esta información antes de acudir:
- Quién te entrevistará y cómo contactar con esa persona en caso de necesitarlo: nombre y teléfono o email. Puede ser que tengas que avisar de que llegas tarde o pasa algo en el camino.
- Ten claro qué tipo de entrevista será y qué rol tiene esa persona. Muy probablemente, antes puedas averiguar más sobre el o la entrevistadora y sepas cuáles son los puntos en los que se puede fijar.
- Realiza una pequeña investigación sobre el puesto, las personas que trabajarán contigo, qué herramientas usan, en qué momento está la empresa, el producto, sus valores, y cómo coinciden con los tuyos. ¡Este punto te va a ser muy útil!
Como bien sabrás, la información es poder y cuanta más tengas en tus manos, más tranquilo/a podrás ir.
Durante la entrevista
Get ready!
Es lógico que mientras estemos hablando, la concentración o el esfuerzo que llevemos a cabo para contestar lo mejor posible haga que nos olvidemos de algún punto importante sobre nuestra carrera profesional. Los nervios nos juegan esa mala pasada y es algo que llega y no te das ni cuenta. Por eso, es importante repasar previamente tu CV y tener en cuenta cuáles son tus puntos más fuertes para esta posición. Te recomendamos que hagas un ejercicio escrito de cuáles son los puntos que quieres dejar claros al terminar la entrevista.
Durante la entrevista, puedes tener tu CV o portfolio delante como ayuda o incluso un papel con los puntos que quieres destacar, pero siempre es bueno que tengas una preparación previa de lo que vas a decir.
Elevator pitch
Un elevator pitch es, básicamente, un discurso o presentación que debe ser impactante, ágil y rápido, ya que debe durar entre 45 segundos y un minuto. En ese tiempo deberíamos ser capaces de resumir quiénes somos y nuestros puntos fuertes para la posición que aplicamos.
Es cierto que, en una situación ideal, deberíamos poder participar en un proceso en el que se nos permita explicarnos lo que necesitemos. No obstante, la realidad es que nunca podemos saber a ciencia cierta a qué entrevista nos enfrentaremos y con cuánto tiempo contaremos. Por ello, puede ser útil tener preparado este speech rápido y conciso.
Prepara el tuyo y repásalo para tenerlo dominado.
Be concise, my friend
Momento de actuar
Piensa en algunas preguntas que pueden llegar a surgir y practica en voz alta la respuesta. Sobre todo, piensa que puede haber algunas preguntas que te descoloquen o que no te esperes, pero si tienes algunas respuestas ensayadas, tendrás más claro el discurso que quieres expresar.
Cuando no sepas qué contestar, simplemente respira y dedica un momento a pensar la respuesta que quieres dar. No pasa nada por no saber una respuesta. Lo reconoces, pero te beneficias de la situación, le das “la vuelta a la tortilla” y aprovechas para destacar que eres una persona que aprende rápidamente y pones algún ejemplo de cuándo has tenido que hacerlo y cómo.
Normalmente, las preguntas más difíciles son aquellas en las que tenemos que describirnos a nosotros mismos, por eso volvemos a la preparación. Si llevas todo pensado previamente, sabrás por dónde quieres dirigir las respuestas.
Preguntas y dudas
Como ya has hecho una investigación previa, es probable que en el camino te hayan surgido dudas sobre la empresa, el sector, el producto, el momento en el que está el equipo, el día a día del puesto… ¡Papel, lápiz y a anotar!
Durante la entrevista habrá un espacio para que hagas preguntas, pero si surge durante la conversación, es una buena práctica realizarlas.
Después de la entrevista
¡No acaba todo al cortar la llamada de entrevista!
Es momento de analizar cómo has hecho la entrevista, de evaluar si el puesto realmente te interesa, si has recabado toda la información que necesitas y si quieres continuar conociendo más.
Buenas prácticas después de una entrevista:
- Escribir un email de agradecimiento y volviendo a mostrar tu interés por el puesto. Si se quedó alguna duda en el tintero, es momento de despejarla.
- Sigue a la empresa y a la persona que te entrevistó en redes sociales. Muchas veces puedes descubrir más novedades sobre cómo trabajan y cómo es su día a día que serán de utilidad para ti.
- Pasada una semana, envía un email preguntando por el proceso de selección e interesándote por los avances del mismo.
Así que, tomate un momento para hacer un análisis sobre ti y tener claro el discurso que quieres dejar en los demás. Hablando con transparencia, honestidad y sinceridad, siempre se llega lejos 😉 Por lo menos esos son los mantras que seguimos en Manfred.
Espero haberte ayudado y que pongas en práctica alguno de estos consejos.